Carlos Segura advierte sobre los inconvenientes que traería penalizar con más impuestos la producción agropecuaria
SANTO DOMINGO– Carlos Segura Foster, miembro del Comité Central del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), pidió a las autoridades a poner más atención al campo para evitar el deterioro de la producción local, de la que en gran medida “depende nuestra paz social”
Segura Foster indicó que no es conveniente cargar nuevos impuestos al sector agropecuario, que no recibe, como otros, exenciones impositivas a los combustibles.
El ex administrador del Banco Agrícola en el análisis del actual Gobierno observa grandes similitudes con pasados gobiernos del PRD, hoy PRM, en los que la sociedad dominicana se ve afectada por los mismos males, muy especialmente en lo económico y en el deterioro de las condiciones de vida.
Segura Foster recordó el periodo 1982-86, gestión que nació bajo el predicamento de que sería el gobierno de las manos limpias y terminaron renegando del gobierno anterior, de su mismo partido y se cobijaron bajo la sombrilla de un movimiento externo, llamado Avanzada Electoral, que aglutinó una parte de la clase media, pero terminaron “escondiendo el jacho”, aludiendo a los elementos progresistas enarbolados por un partido definido como social demócrata
Recuerda Segura Foster que en el periodo de gobierno mencionado la deuda con los productores y molineros fue de tal magnitud que una de las primeras medidas del Presidente Balaguer, al regresar al Gobierno en 1986 fue transferir los bienes y principales funciones del INESPRE al BAGRICOLA.
“Además del daño por acumulación de deudas al sector agropecuario, por estar gestándose en la actualidad imponer impuestos a la producción agropecuaria, recuerdo también el daño que se le hizo a los productores y exportadores, al disponerse el cobro de un impuesto denominado Recargo Cambiario, que dispuso el cobro del 36 por ciento del valor de las exportaciones y la entrega de un peso por cada dólar exportado, lo que a la postre era otra penalización ya que la tasa de cambio para la época era de aproximadamente 3 pesos.