Cándido Simón explica los pasos legales para declarar la muerte de Sudiksha Konanki

Los padres de Sudiksha Konanki, la estudiante universitaria de 20 años de quien se desconoce su paradero desde la madrugada del 6 de marzo en la playa del hotel RIU República, han solicitado formalmente a las autoridades que su hija sea declarada legalmente fallecida.   

Sin embargo, de acuerdo con lo explicado por el abogado Cándido Simón, antes de emitir una declaración de fallecimiento en casos de desaparición, deben agotarse ciertos procedimientos legales. 

Según detalló, anteriormente el Código Civil y la Ley Orgánica de los Actos del Estado Civil exigían un período de espera de 10 años para reconocer la muerte de una persona desaparecida. Pero, esta normativa ha sido modificada, permitiendo que el proceso pueda agilizarse en circunstancias específicas.  

Simón enfatizó que la determinación final recae en un juez de jurisdicción civil, quien evaluará las circunstancias del caso antes de emitir una decisión.

En este caso, la presunción de que la joven desapareció en el mar podría facilitar la declaración de fallecimiento.  

El testimonio para avanzar en el proceso  

Para que la solicitud de los padres de Konanki tenga validez, debe presentarse formalmente ante un juez mediante un acto de alguacil. También debe ser remitido al juez el testimonio del ciudadano estadounidense Joshua Riibe, quien es considerado como la última persona que tuvo contacto con la extrajera antes de su desaparición.

Según Simón, es esencial que se realice un anticipo de pruebas mediante un interrogatorio formal a Riibe, cuyo testimonio podría proporcionar información crucial sobre las circunstancias de la desaparición. Posteriormente, esta información será remitida al juez competente para su evaluación.  

Si el juez determina que la evidencia es suficiente, se procederá con la emisión del acta de defunción, a pesar de que el cuerpo de la joven no haya sido encontrado.  

Las últimas imágenes captadas por cámaras de seguridad que se tienen muestran a Konanki en compañía de Joshua Steven Riibe, de 22 años, mientras ambos se dirigían a la playa en horas de la madrugada.