Abel Martínez denuncia secuestro de personal municipal y equipos de la alcaldía de Santiago por parte de la Policía Nacional
«El deber de mantener el orden y la limpieza en los espacios públicos de este municipio es un compromiso indelegable. Es la primera vez en la historia democrática y municipal que se protagoniza un acto ilegal de esta manera, que busca subrogar el derecho que nos otorga la Ley 176/07 y la Constitución», expresó el alcalde de Santiago de los Caballeros.
Santiago de los Caballeros.- El alcalde de Santiago de los Caballeros, Abel Martínez, denunció que agentes de la Policía Nacional, amparados en alegadas «órdenes de arriba», procedieron de forma ilegal a secuestrar personal de patrullas municipales y equipos del Ayuntamiento de Santiago, mientras realizaban las acostumbradas labores de desmonte de publicidad no permitida.
Dijo que, en un hecho sin precedentes, agentes policiales secuestraron al personal que estaba cumpliendo con la misión sagrada de ordenar a Santiago de los Caballeros, sin que hasta el momento se haya informado el paradero del personal, ni de los equipos de motor y herramientas de trabajo que fueron secuestrados por el cuerpo del orden.
«Estos alegaron que se estaba retirando propaganda política y las vallas políticas o de cualquier tipo, el Ayuntamiento de Santiago siempre las ha retirado si las mismas se encuentran en aceras, contenes y espacios públicos que no tengan la debida autorización, para lo cual nos faculta la Ley 176-07 y la Constitución de la República», indicó Abel Martínez en su despacho ante los medios de comunicación.
El jefe del Gobierno Municipal de Santiago de los Caballeros hizo un llamado al Gobierno Central, entendiendo que el presidente de la República no tiene conocimiento de lo sucedido contra un órgano legítimo del Estado como es la Alcaldía, expresando que «si se trata de una persecución, quiero advertirle al Gobierno y a la Policía Nacional, que mi función como alcalde, no tiene nada que ver con mis aspiraciones a presidente de la República. Mis labores como alcalde están estrictamente ceñidas al cumplimiento de la ley y de la Constitución».